La prueba masculina de XCO fue emocionante de principio a fin, dejando hasta el final un desenlace que muy pocos podían imaginar cuando Tom Pidcock perdía unos valiosos segundos en la tercera vuelta tras verse obligado a parar por un pinchazo. Pero el británico, compañero de Pauline Ferrand-Prévot en el INEOS Grenadiers, no tiró la toalla y demostró que nada está perdido hasta que no acaba.
Los otros dos grandes protagonistas de la carrera fueron el francés Victor Koretzky, que corría en casa arropado por sus fans, y el sudafricano Alan Hatherly, que completó una de las mejores carreras de su trayectoria deportiva. Tanto uno como otro dominaron la prueba aguantando los ataques de un Pidcock insaciable que no dio su brazo a torcer en ningún momento.
Pidcock fue capaz de remontar posiciones tras su inoportuno pinchazo para, en la última vuelta, adelantar a Koretzky y hacerse con la medalla de oro por delante del francés, que se tuvo que conformar con la plata. Hatherly, por su parte, se colgó el bronce. David Valero, el mejor español, terminó en el décimo puesto después de remontar numerosas posiciones tras una salida desde atrás.