La Unión Europea aprobó el pasado miércoles 18 de julio la imposición de elevados aranceles sobre las importaciones de bicicletas eléctricas procedentes de China. Esta medida es la respuesta a la denuncia presentada por la Asociación Europea de Fabricantes de Bicicletas, que representa a más del 25% de la producción de bicicletas eléctricas en el viejo continente, argumentando que existe un perjuicio importante en la industria europea por las prácticas de Dumping o competencia desleal de la industria china.
¿Qué es el Dumping? La palabra dumping es un término inglés utilizado para referirse a las ventas a pérdida. Se trata de una práctica, muy habitual en la industria, que consiste en vender un determinado producto por debajo del precio de costo con el fin de eliminar a la competencia y adueñarse del mercado. Para la Asociación Europea de Fabricantes de Bicicletas, los fabricantes chinos de bicicletas eléctricas venden sus productos demasiado baratos, logrando así importar un mayor número de unidades en el mercado europeo: de 200.000 unidades en 2014 a 700.000 unidades a principios de 2018.
Para frenar el crecimiento de las importaciones de bicicletas eléctricas procedentes de China, la Unión Europea ha decido imponer de forma provisional a los fabricantes asiáticos unos aranceles que oscilarán entre el 21.8% y el 83.6% sobre el valor de la mercancía. Con esta medida, la UE pretende proteger a los fabricantes europeos de bicicletas frente a las supuestas prácticas de competencia desleal de sus homólogos chinos, a la espera de adoptar una decisión final que permita que todos los productores "puedan ejercer su actividad en condiciones comerciales equitativas".