Las bebidas isotónicas son ideales para reponer los líquidos y minerales que se pierden durante la actividad física intensa. Sin embargo, no todas las opciones disponibles en el mercado son saludables o accesibles para todos los presupuestos.
Por esta razón, en este artículo mostramos dos recetas caseras para preparar bebida isotónica de manera fácil y económica. Por un lado, una bebida isotónica de limón, muy sencilla y económica; por otro lado, una bebida isotónica de sandía con agua de coco, una opción deliciosa y refrescante.
Receta de limonada isotónica
Ingredientes:
- 1 litro de agua
- 2 limones
- 2 cucharadas de miel
- 1/4 de cucharadita de sal
- 1/4 de cucharadita de bicarbonato de sodio
Preparación:
- Exprime los limones y reserva el jugo.
- En un recipiente, mezcla el agua, la miel, la sal y el bicarbonato de sodio hasta que se disuelvan bien.
- Agrega el jugo de limón y mezcla de nuevo.
- Sirve la limonada isotónica en un vaso con hielo o en un bidón para salir en bici.
Esta bebida isotónica es una opción refrescante y económica, ideal para aquellos ciclistas que buscan una alternativa natural a las bebidas deportivas comerciales. La miel y el limón proporcionan una fuente natural de carbohidratos, mientras que la sal y el bicarbonato de sodio ayudan a reponer los electrolitos perdidos durante el ejercicio.
Receta de bebida isotónica de sandía
Ingredientes:
- 4 tazas de sandía sin semillas, cortada en cubos
- 1 taza de agua de coco
- 1 cucharada de miel
- 1/4 de cucharadita de sal
Preparación:
- Coloca la sandía en un recipiente y tritúrala con una batidora hasta obtener una mezcla líquida y suave.
- Agrega el agua de coco, la miel y la sal, y mezcla hasta que se combinen bien.
- Sirve la bebida isotónica de sandía en un vaso con hielo o en un bidón para salir en bici.
Esta bebida isotónica es una opción refrescante y deliciosa para reponer los líquidos y minerales perdidos durante la actividad física intensa. La sandía es una fuente natural de carbohidratos y electrolitos, mientras que el agua de coco proporciona una fuente adicional de electrolitos y potasio. La miel agrega un toque de dulzor natural, y la sal ayuda a equilibrar los niveles de sodio en el cuerpo.