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Comprando en China: todo lo que hay que saber sobre aduana, impuestos y servicios de transporte

Todo lo que hay que saber antes de comprar un producto procedente de China: aranceles de aduana, impuestos y servicios de transporte.

No es ningún secreto que tanto luces como ropa, accesorios e incluso cuadros 'del chino' son bastante populares en el mundo del ciclismo. La razón de esta inquietante popularidad no es otra que un precio muy atractivo con respecto a un mismo producto comercializado por una marca de prestigio, a pesar de tratarse, en la mayoría de casos, de imitaciones y copias que nada tienen que ver con la calidad y rendimiento del producto original. Calidad del producto aparte, es importante señalar que cualquier compra realizada en China debe pasar aduanas y, por tanto, en ocasiones conlleva unos costes extra que vale la pena conocer.

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Comprando en China: los impuestos

En España, comprar un producto no proveniente de la UE (Unión Europea) acarrea una serie de gastos extras en forma de aranceles y otros impuestos. La importación de mercancías en un territorio fiscal diferente al del origen de la mercancía conlleva la obligación de tramitación aduanera. Toda mercancía debe pasar unos controles fronterizos de seguridad (controles sanitarios, de calidad, etc) y cumplir con las obligaciones fiscales del país de destino (pago de impuestos y aranceles) además de otros gastos derivados de la gestión de los trámites de importación, custodia y almacenamiento de los envíos.

En función de la legislación de cada país, los envíos postales pueden estar sujetos a controles aduaneros de salida (exportación) en el país de origen y de entrada (importación) en el país de destino. Como norma general, las mercancías importadas deben pagar los impuestos indirectos que gravan el consumo en el territorio de destino: IVA en el caso de Península y Baleares; IGIC, AIEM y RM en Canarias; o IPSI en Ceuta. Además de estos impuestos indirectos, también hay que pagar los derechos aduaneros o arancel comunitario (impuesto comunitario de la UE).

¿Cuánto cuesta importar (o comprar) un producto de China? En lo referente al IVA, cualquier producto con un valor por encima de 22€ es susceptible de pagar dicho impuesto. En el caso de tratarse de un regalo (un truco muy empleado en los envíos asiaticos), son susceptibles de pagar IVA todos aquellos productos con un valor superior a los 45€. El tipo general de IVA para la importación de productos en España es del 21%, pero en ciertos productos se aplica un IVA reducido (10%) o superreducido (4%) calculado sobre el valor de las mercancías.

Comprando en China: los aranceles de aduana

Las mercancías por encima de 150€ son susceptibles del pago de derechos arancelarios de importación (impuesto comunitario de la Unión Europea). Como norma general, no se paga arancel para mercancías valoradas por debajo de 150€, aunque sí pueden ser susceptibles del pago de IVA de importación e impuestos especiales. Algunos productos están libres de derechos y otros están sujetos a derechos adicionales, dependiendo del país de fabricación y del producto.

Como norma general, los productos importados con un valor superior a 150€ pagan un 2.5% de su valor en aranceles, además del IVA correspondiente. Este 2.5% de recargo no es una tasa fija y puede ascender, en función del tipo de mercancía, hasta el 17%. Además del arancel correspondiente, los productos importados también son gravados con gastos de gestión y DUA (Documento Único Administrativo), un proceso obligatorio para el importador realizado por los funcionarios de aduanas y normalmente gestionado por la empresa encargada del envío o del transporte, ya sea Correos o una firma de Mensajería.

En resumen, comprar un producto en China con un valor superior a 22€ trae consigo un coste extra del 21% de IVA más aproximadamente unos 20€ de gastos de gestión y DUA, variable en función del servicio encargado del transporte del paquete. Para un producto con un precio superior a los 150€, hay que asumir un 21% más en concepto de IVA, un 2.5% en concepto de aranceles de aduana, y unos 20€ para gastos de gestión y DUA.

Comprando en China: las trampas para no pagar más

Como es de suponer, las empresas asiáticas tipo GearBest o DealExtreme no están por la labor de tener que pagar impuestos y aranceles en cada uno de los miles de envíos que realizan a diario, e incluso se atreven a ofrecer gastos de envío gratuitos. ¿Cómo es posible? Enviando el producto desde China hasta alguno de sus almacenes dentro de la UE para, una vez dentro de Europa, enviar el producto al usuario final sin que éste tenga que asumir ningún coste adicional. Aquí entra en juego una red internacional de transporte y 'chanchullos' varios que escapan al dominio público.

Otras empresas asiáticas como, por ejemplo, la conocida AliExpress, trabajan de diferente forma. Esta cadena actúa como un gran mercado de pequeñas tiendas, al estilo Amazon, y salvo que se indique lo contrario, el producto sí que es enviado al usuario final directamente desde China, siendo una verdadera lotería saber si tocará pagar aranceles e impuestos o no. El truco está en el servicio postal utilizado para el envío. Si se trata de una empresa de mensajería privada, el coste de envío incluye, en la mayoría de ocasiones, los gastos relativos al paso por aduana, aunque puede ser gravado con los impuestos propios del país de destino. Si se trata del servicio postal del país, Correos en el caso de España, el susto en forma de factura abultada queda asegurado.

Mención especial merece el apartado de garantía de producto y devolución. Aunque compremos un producto asiático a través (o con) una empresa con almacén dentro de la UE, la venta continúa realizándose en China, fuera de las regulaciones europeas. Por lo tanto, tanto la garantía del producto como las devoluciones son las marcadas por las leyes del país de origen, siendo especialmente importante estar al tanto de dicha normativa para prevenir desenlaces nada agradables y costes innecesarios.