Según ha reportado el Billings Gazette, el periódico más importante del estado estadounidense de Montana, un ciclista de montaña de 60 años de edad resultó herido de gravedad tras ser atacado por un oso grizzly mientras rodaba por un sendero cercano a la localidad de Big Sky el pasado lunes 25 de mayo. Las primeras pesquisas apuntan a que el ciclista pudo sorprender al oso después de una curva cerrada, provocando así el ataque del animal.
Morgan Jacobsen, portavoz del Departamento de Pesca, Vida Silvestre y Parques de Montana, ha explicado al diario que un hombre de unos 60 años estaba montando solo por un sendero de una propiedad privada en la Comunidad de Spanish Peaks, justo encima del sendero del parque Ousel Falls cerca de Big Sky cuando ocurrió el ataque. Las investigaciones iniciales muestran que es probable que el jinete sorprendiera al oso después de doblar una curva cerrada en el sendero y no parece un ataque depredador
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El ciclista tuvo la suerte de poder escapar del oso y alcanzar la carretera donde un motorista que pasaba en ese momento le prestó ayuda. El hombre, que sufrió heridas graves en la cara y la espalda, fue trasladado por aire a un hospital de Billings, donde permanece en estado crítico pero estable. Jacobsen ha recordado que las personas que se recrean en el territorio de los osos deberían llevar aerosol para osos, ir en grupo, evitar las zonas con cadáveres de animales y buscar señales de actividad de osos
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El oso grizzly, también llamado oso gris, es una de las subespecies del oso pardo más grandes del planeta, y suele vivir en las tierras altas del territorio norteamericano. Es un animal solitario, excepto durante la temporada del desove del salmón, cuando se junta un enorme número de osos en arroyos y zonas costeras para alimentarse. Se trata de un animal extremadamente peligroso, ya que puede alcanzar pesos de hasta 550 Kg y medir hasta 2.4 metros de altura posado sobre sus patas traseras, por no mencionar que alcanza los 55 km/h al correr.