Un reciente estudio de Allianz, la compañía aseguradora más grande de Europa, concluye que conducir una bicicleta eléctrica es mucho más peligroso que hacerlo con una bici normal. Según los cálculos de Allianz, el riesgo de accidente mortal al conducir una bici eléctrica es tres veces mayor que en una bicicleta normal sin motor en todos los grupos de edad.
"El riesgo medio de mortalidad durante cinco años en una bicicleta de pedaleo asistido es tres veces mayor que en una bicicleta convencional en todos los grupos de edad. El riesgo de muerte por lesión es significativamente mayor tanto en el grupo de personas mayores de 65 años como en el grupo de todos los jóvenes de hasta 64 años", explica Jörg Kubitzki, investigador de accidentes de Allianz.
Para obtener este dramático resultado, Allianz ha comparado los datos de accidentes de la Oficina Federal de Estadística de Alemania con los kilómetros de conducción estimados publicados por el Ministerio Federal de Transportes en el estudio Movilidad en Alemania. Según estas estadísticas, una media de 11,64 ciclistas con bicis eléctricas mueren por cada mil millones de kilómetros recorridos, mientras que la cifra comparable para las bicicletas no motorizadas es de 8,96 ciclistas.
De los 77 millones de bicicletas estimados en Alemania, un 5% de las mismas son bicicletas eléctricas, lo que se traduce en cuatro millones de unidades circulando por el país. Sin embargo, la proporción de accidentes mortales con bicis eléctricas es de casi el 18 por ciento, una cifra alarmante que la mayor aseguradora europea ha puesto de relieve para concienciar a los usuarios (y sus bolsillos).