En el mundo del ciclismo de carretera y montaña, la seguridad y la eficiencia del equipamiento juegan un papel determinante. Buena prueba de ello es el Ravemen FR300, un accesorio que no solo sirve como soporte para ciclocomputadores, sino que además incorpora una potente luz diurna, elevando el nivel de visibilidad del ciclista en todo tipo de condiciones.

Este dispositivo se presenta como una solución doblemente práctica. Por un lado, permite fijar de forma segura ciclocomputadores que utilicen el sistema de anclaje estándar de Garmin. Por otro, incorpora una luz frontal que, gracias a su lente gran angular con visibilidad lateral, asegura que el ciclista sea visto desde diferentes ángulos, mejorando su presencia en la carretera, especialmente en rutas compartidas con vehículos a motor.

Con una potencia máxima de 300 lúmenes, el Ravemen FR300 ofrece seis modos distintos de funcionamiento luminoso. Estos se dividen en tres fijos y tres intermitentes, lo que permite al usuario adaptar la intensidad y el tipo de iluminación en función del entorno y la necesidad. Este abanico de opciones no solo facilita el ahorro energético, sino que también maximiza la atención de conductores y peatones, contribuyendo a una circulación más segura.

Otro aspecto destacable es su resistencia a las inclemencias del tiempo. Con certificación IPX6, el FR300 mantiene su funcionalidad incluso bajo lluvia intensa o ambientes con presencia de polvo. Esta durabilidad convierte al dispositivo en un aliado fiable durante todo el año, independientemente del clima.

En cuanto a la autonomía, el soporte-luz de Ravemen equipa una batería recargable mediante USB que varía su duración según el modo de uso: desde 4 horas cuando opera a máxima potencia hasta 24 horas en el modo de parpadeo lento. Este margen de funcionamiento permite cubrir con solvencia salidas tanto cortas como de larga distancia, sin que la batería suponga un motivo de preocupación.

El montaje del FR300 es directo y compatible con los soportes originales de Garmin. Su diseño permite colocarlo justo debajo del ciclocomputador, integrándose en el conjunto del manillar sin generar molestias visuales ni aerodinámicas. Sus dimensiones (75 x 57 x 21 mm) y su peso de solo 75 gramos refuerzan esta integración sin añadir volumen ni carga excesiva al equipo del ciclista.

En lo referente al precio, el Ravemen FR300 se sitúa como una opción asequible teniendo en cuenta su doble funcionalidad. Con un coste recomendado de 49,99€, puede adquirirse a través de la tienda oficial de la marca en Amazon, lo que facilita su acceso a los usuarios interesados en mejorar su seguridad sin comprometer la estética ni la ergonomía de su bicicleta.