Muchos estudios recientes indican que la forma más eficaz de aumentar la visibilidad de un ciclista frente a otros conductores es utilizando una luz trasera con parpadeo diseñada para ser visible durante el día. Las luces de circulación diurna están específicamente diseñadas con un patrón de parpadeo, enfoque y alcance que las hace destacar en condiciones de luz diurna.
¿Qué son las luces de circulación diurna?
No todas las luces para bicicletas son iguales. Aunque la luminosidad es importante, para que una luz sea efectiva durante el día necesita más que un alto número de lúmenes. Las verdaderas luces de circulación diurna están diseñadas con un enfoque específico, un patrón de parpadeo distintivo y un alcance que las hace visibles desde distancias considerables bajo la luz del sol. Si no cumple con estos tres criterios, es simplemente una luz estándar.
La mayoría de las luces para ciclismo tienen un parpadeo constante, lo cual puede ser menos perceptible para los conductores. Las luces diurnas reales incorporan un modo de parpadeo que varía en intensidad y patrón, haciendo que sean mucho más visibles durante el día.
Para ser visibles a plena luz del día, estas luces están diseñadas con un enfoque que dirige o amplía el haz de luz, aumentando su intensidad y alcance. Sin este diseño, incluso las luces muy brillantes pueden pasar desapercibidas en la carretera durante el día.
Cuanto antes un conductor pueda ver a un ciclista, más tiempo tendrá para reaccionar de manera segura. Las luces de circulación diurna son visibles desde al menos 400 metros, y algunos modelos alcanzan una visibilidad de hasta 2 kilómetros durante el día.
Ventajas de las luces de circulación diurna
En una época en la que las distracciones al volante son comunes, es crucial tomar medidas para mejorar la seguridad en la carretera. Algunos modelos de luces diurnas son visibles hasta 2 kilómetros de distancia, incluso bajo la luz del sol. Además, también hay modelos que integran un radar para alertar al ciclista sobre vehículos que se aproximan por detrás, proporcionando más tiempo para reaccionar tanto al ciclista como al conductor.
Entre los beneficios comprobados de hacer uso de luces diurnas en una bicicleta:
- Mayor visibilidad: usar una luz trasera con parpadeo durante el día aumenta la visibilidad en 2,4 veces en comparación con no usar ninguna luz, y 1,4 veces más que usando luces en modo fijo. Las luces diurnas utilizan un patrón de parpadeo diseñado para resaltar especialmente durante el día.
- Reducción de colisiones: algunos estudios indican una disminución del 33% en accidentes cuando las bicicletas están equipadas con luces diurnas. Tendencias similares se observan en automóviles y motocicletas que usan luces diurnas, con reducciones de colisiones del 25% y 13%, respectivamente.
- La mayoría de los accidentes ocurren durante el día: ocho de cada diez accidentes ciclistas suceden durante las horas diurnas, cuando hay más tráfico. Usar luces diurnas es la forma más efectiva de aumentar la visibilidad durante este lapso de tiempo.
- Menos visibles de lo que se piensa: algunas investigaciones muestran que los ciclistas sobreestiman su visibilidad en un 700%, lo que les lleva a creer que no es necesario hacer uso de luces.
Implementar una luz trasera con parpadeo diurno es una medida simple pero altamente efectiva para mejorar la seguridad en carretera. Las luces de circulación diurna están diseñadas específicamente para aumentar la visibilidad del ciclista durante el día, reduciendo significativamente el riesgo de accidentes en un entorno donde la atención de los conductores cada vez está más dispersa.