En el mundo de la alta competición, cualquier ganancia, por mínima que sea, puede llevar a la victoria. Esto es precisamente lo que le sucedió a Victor Koretzky, que fue capaz de ganar la Copa del Mundo de Short Track celebrada en Nové Mesto montando unos neumáticos nada habituales para una bici de Cross Country: unos Pathfinder Pro 2Bliss Ready de gravel.
La elección de Koretzky no fue fruto del azar. Vale la pena recalcar que el trazado de Short Track del circuito checo presentaba unas condiciones ideales para usar un neumático de gravel, con un firme muy compacto y sin tramos técnicos que pusiesen en peligro la integridad de las cubiertas o la falta de tracción en alguna sección.
El corredor francés del Specialized Factory Racing se arriesgó en la carrera y le salió bien, logrando llevarse la victoria en un ajustado sprint final donde se impuso a Blevins, Litscher y Schwarzbauer. ¿Fue gracias al neumático elegido? Puede que sí o puede que no, pero lo cierto es que alguna ventaja sí que le aportó.
El Pathfinder Pro 2Bliss Ready es un neumático de gravel muy rápido, aunque también versátil ya que ofrece una banda de rodadura lisa en su zona central para alcanzar la máxima velocidad, pero con un ligero taqueado en los laterales para mantener la justa y necesaria tracción en los tramos más sueltos y en los pasos por curva.
Además, es una cubierta muy ligera, de entre 540 y 575 gramos en sus dos medidas de mayor ancho (42 o 47 mm), con un compuesto idéntico al de otros neumáticos de Specialized para MTB, y con una carcasa de 120 TPI con protección antipinchazos. Combinados con las ruedas Roval Control SL Team, Koretzky llevaba bajo sus pies una de las configuraciones de ruedas más ligeras de toda la Copa del Mundo.
Por supuesto, hubo una serie de factores que jugaron a favor de elegir una cubierta de gravel en lugar de una específica de XC, pero tanto Koretzky como su equipo supieron ver la oportunidad y, por suerte para ellos, les salió mejor que bien. De una manera o de otra, no hay duda de que todavía habrá más sorpresas durante el resto de la temporada.