Fem van Empel, una de las figuras más destacadas del ciclismo femenino internacional en los últimos años, ha decidido hacer una pausa en su carrera deportiva. La neerlandesa, múltiple campeona mundial y europea, ha comunicado públicamente su decisión de retirarse temporalmente de la competición para centrarse en su bienestar emocional y mental, una determinación tomada de forma conjunta con su equipo.
Atraviesa una etapa en la que necesita un respiro
A sus 21 años, Van Empel ha vivido una trayectoria vertiginosa. Su dominio en los circuitos de barro la ha llevado a lo más alto del podio en los principales campeonatos del mundo, convirtiéndose en una referencia dentro de la disciplina. Sin embargo, el alto nivel de exigencia que impone el deporte de élite, con entrenamientos continuos, presión mediática y un calendario de competición cada vez más intenso, ha llevado a la ciclista a priorizar su salud por encima de los resultados.
En un comunicado, Van Empel ha expresado que los logros alcanzados en los últimos años han sido fruto de una dedicación total, pero también reconoce que atraviesa una etapa en la que necesita detenerse. Estos años han sido una experiencia increíble. Pero actualmente me enfrento a ciertos retos que requieren atención. Junto a mi equipo, hemos considerado que dar un paso atrás es lo más adecuado
, explica la corredora.
La decisión de Van Empel ha sido recibida con respeto y apoyo por parte de su equipo técnico, que ha manifestado su compromiso de acompañarla durante este proceso de recuperación. Desde la estructura que la respalda insisten en que lo prioritario ahora es el equilibrio mental y emocional de la deportista, y que solo cuando se sienta plenamente preparada, podrá plantearse un regreso a la competición.
Este tipo de pausas, cada vez más frecuentes en el deporte de alto nivel, evidencian la creciente conciencia sobre la importancia de la salud mental en los atletas. A lo largo de los últimos años, numerosas figuras del deporte profesional han dado visibilidad a esta problemática, rompiendo tabúes y contribuyendo a normalizar el hecho de que la fortaleza mental también requiere cuidados específicos, al igual que el estado físico.
El caso de Van Empel pone de relieve los desafíos que enfrentan los deportistas desde edades muy tempranas. La exigencia de rendimiento constante, la presión por los resultados y la exposición pública son factores que inciden directamente en su salud psicológica. A pesar de contar con un palmarés envidiable, Van Empel opta ahora por escucharse a sí misma y tomar decisiones con perspectiva, pensando en su futuro más allá de los circuitos.
Aunque no se ha especificado cuánto tiempo durará esta pausa, tanto la ciclista como su entorno confían en que este período de recuperación será clave para volver con energías renovadas. La comunidad ciclista internacional, compañeros de profesión y aficionados han mostrado su apoyo y comprensión, destacando el coraje de una decisión que refleja madurez y responsabilidad.