Bicicletas

Rocky Mountain busca evitar la quiebra y salvar su futuro con un plan de reestructuración financiera

Rocky Mountain explica que las dificultades comenzaron durante la pandemia, cuando la fuerte demanda de bicicletas chocó con problemas de suministro debido a la escasez global y el aumento de los costos de producción.

Abel Ruiz

La marca canadiense de bicicletas Rocky Mountain ha presentado un plan de reestructuración financiera bajo la Ley de Acuerdos con Acreedores de Empresas (CCAA, por sus siglas en inglés), con el objetivo de evitar la quiebra y garantizar la continuidad de sus operaciones. La empresa informa que esta medida busca minimizar el impacto en sus actividades comerciales mientras trabaja en estabilizar su situación económica.

Rocky Mountain busca evitar la quiebra y salvar su futuro con un plan de reestructuración financiera
Logotipo de la marca. Imagen: Rocky Mountain

Una marca icónica en el mundo de las bicis

Fundada en Vancouver en 1981, Rocky Mountain se ha consolidado como una de las marcas más icónicas del sector. En 1997, fue adquirida por Procycle, una empresa de Quebec que posteriormente adoptó el nombre de Rocky Mountain en 2018 para reflejar su enfoque exclusivo en esta marca. Aunque la sede corporativa se mantiene en Quebec, el centro de investigación y desarrollo continúa operando desde Vancouver, donde la marca dio sus primeros pasos.

En los últimos años, la empresa ha experimentado importantes cambios en su liderazgo. En 2022, Katy Bond asumió el cargo de directora ejecutiva, pero dejó la compañía el verano pasado, lo que llevó a Raymond Dutil, propietario de largo recorrido, a retomar el liderazgo. Además, en 2023, Rocky Mountain amplió su presencia internacional con la adquisición de BikeAction, su distribuidor en mercados europeos clave como Alemania, Austria y Benelux.

Rocky Mountain explica que las dificultades comenzaron durante la pandemia, cuando la fuerte demanda de bicicletas chocó con problemas de suministro debido a la escasez global y el aumento de los costos de producción. Sin embargo, tras el fin de la emergencia sanitaria, la empresa se enfrentó a una drástica caída en los precios de venta, lo que impactó gravemente sus márgenes de ganancia y generó una presión financiera insostenible.

Esta combinación de factores ha llevado a la compañía a buscar la protección legal bajo la CCAA para reorganizarse y asegurar su viabilidad a largo plazo. Este proceso de reestructuración podría ser decisivo para garantizar la continuidad de la marca en un mercado tan competitivo y en constante evolución que hoy por hoy no atraviesa sus mejores momentos.

Durante más de cuatro décadas, Rocky Mountain Bicycles ha estado a la vanguardia de la innovación en ciclismo de montaña. Desde los escarpados senderos de la costa norte hasta el escenario mundial, nuestras bicicletas han inspirado una pasión por la aventura y un amor por andar en bicicleta. Hoy, enfrentamos un desafío sin precedentes. Pero fieles a nuestra herencia, estamos decididos a enfrentar este momento con resiliencia y compromiso con nuestra comunidad, comentan desde Rocky Mountain.