Las bicicletas tienen mucho que decir en el futuro de la movilidad urbana, sobre todo después de esta grave crisis sanitaria que ha puesto de manifiesto sus cualidades como vehículo individual y no contaminante idóneo para desplazarse por la ciudad. Ahora bien, lo que depara este segmento en los próximos años puede ser muy diferente a lo que hoy en día se utiliza, teniendo en cuenta proyectos como Poimo, presentado por un grupo de investigadores de la Universidad de Tokio.
Poimo son las siglas de POrtable and Inflatable MObility, que no es otra cosa que una bicicleta eléctrica portátil e inflable. La bici cabe en una mochila y está compuesta por una estructura inflable de 2.3 Kg de peso a la que, una vez hinchada, se le conectan ruedas, motor, batería y manillar. Según sus responsables, el peso total es de 7.8 Kg completamente montada, bastante menos que cualquier bici eléctrica convencional.
Para la creación de la estructura de Poimo los investigadores han empleado poliuretano termoplástico (TPU), un material muy resistente que puede moldearse fácilmente y que es capaz de soportar el peso del usuario sin deformarse con apenas 0.5 Bar de presión de inflado. Este material ya se emplea en otro tipo de inflables de uso personal como pueden ser camas, sofás o sillones, presentes en el mercado desde hace varios años.
Las ventajas de rodar sobre una bicicleta eléctrica inflable respecto a una de metal son varias: menos peso y por tanto mayor autonomía de uso, mayor facilidad de transporte, e incluso menor riesgo de daños a terceros en caso de colisión. Por otro lado, Poimo hace uso de un doble juego de ruedas delante y detrás que mejora la estabilidad al circular, y cuenta con una amplia superficie de apoyo que sin duda es mucho más cómoda que un diminuto sillín.
Imaginamos un nuevo tipo de movilidad personal hecha de materiales blandos, ligeros e inflables. Un cuerpo blando permite una interacción más segura del usuario con los peatones y los conductores; las propiedades ligeras e inflables permiten a los usuarios llevarlo fácilmente como dispositivo portátil, desinflándolo, doblándolo y metiéndolo, por ejemplo, en una mochila. Como encarnación de esa movilidad suave, hemos creado un prototipo de Poimo (POrtable and Inflatable MObility)
, explican desde la Universidad de Tokio.