Aunque no se trata de una versión comercial, los responsables de Niner Bikes han publicado las imágenes de una exclusiva RIP 9 RDO cuyo cuadro, en lugar de estar anodizado o pintado, ha sido terminado con un recubrimiento denominado Cerakote. ¿De qué se trata? De un recubrimiento cerámico que ofrece un rendimiento superior al anodizado tradicional, usado desde hace muchos años tanto en la industria de las armas como en el campo militar.
Cerakote es un recubrimiento de polímero cerámico que puede aplicarse a metales, plásticos, madera y otros polímeros. La formulación única usada para este recubrimiento cerámico mejora las propiedades del material donde se aplica, incluyendo una mayor resistencia a la abrasión y el desgaste, resistencia a la corrosión, resistencia química, resistencia al impacto y dureza.
Otra gran ventaja de Cerakote es que, al tratarse de un recubrimiento final que no necesita otros aditivos, es extremadamente ligero en comparación con un acabado típico de imprimación más pinturas de acabado más barnices. Por otro lado, el recubrimiento tiene propiedades hidrorrepelentes y está disponible en multitud de tonos distintos, inclusive tonos compuestos como los empleados en el camuflaje militar.
La Niner RIP 9 RDO en edición camuflaje con recubrimiento Cerakote no es la primera que hace uso de este acabado en la industria ciclista. Marcas como Thompson, Rolf Prima o Groovy ya ofrecen en sus respectivos catálogos distintos productos con acabado Cerakote por un precio muy similar al de las versiones anodizadas o pintadas.
¿Es Cerakote el futuro de las pinturas para bicicletas? Desgraciadamente no, ya que además de ser una marca registrada, su aplicación tiene que ser realizada por instaladores certificados y requiere de un largo proceso de terminación. Para dar vida a esta exclusiva Niner RIP 9 RDO, un equipo de tres especialistas de Cerakote trabajó sin descanso durante casi una semana, algo nada rentable cuando se trata de fabricar en serie muchas bicicletas.